lunes, 30 de diciembre de 2013

Un desmadre de viaje

Ciencialimpia error de marca

“Recién empieza” que diría una porteña de cuna, explota la histeria femenina, postmenopausica de Barbra Streisand, pero es su papel y lo hace correctamente, quizás sea más problema de la directora  que se empeña en proponernos la idea de que  madre no hay más que una y, al parecer, afectadas todas de verbosidad excesiva, imposibles, alocadas,  coleccionistas de ranas  y un poco ludópatas. La misma directora de 27 vestidos y Step Up, ahora entiendes el fondillo de moralina pija y envoltorio romántico y superficial, pero… su películas venden, seguro que es por su tremendo sentido del humor que me ha sacado dos sonrisas en todo el metraje.

Acabas nervioso perdido tú, como espectador y  por supuesto su hijo  el emprendedor autónomo con estudios de química y ambiciones ecoempresariales que acaba vendiendo el producto gracias a las clases de marketing de su madre, la reina de los calvos, como ella misma se denomina.
Cuenta de dos mundos solitarios una por opción y otro por aceptación que se unen y dan compañía a través de un viaje lleno de confesiones de los que  mejor no escuchar detalles.
Una mezcla de Tomates verdes fritos, los padres de él, y destellos de nuestra querida Gracita Morales en una Road  Movie donde sólo faltaría un Leslie Nielsen para  empujar el off.
De él no hay mucho que hablar se llama Seth Rogen más conocido por su eterna imagen de Freaks falto de sexo y golfo venido a menos.

Poco digo de él excepto que le cuadran más películas tipo Virgen a los 40, Supersalidos, Superfumados… en fin un superstart con poco interés.


El detalle: La finísima filosofía de la directora y del guionista que basa el sentido de la independencia en poder comer M&M en la cama. ¡ozú qué espanto!

domingo, 22 de diciembre de 2013

El Asalto. Basada en hechos reales

"Tenemos que enseñar los dientes"

El asalto Montesinadas
Pues nada, que me enganché al cine francés de acción y tocó otra película basada en hechos reales. En   la Noche Buena del 1994 y otra vez el demonio del terrorismo islámico. En esta ocasión secuestran un avión con las intenciones que todos imaginamos. Pero… no pudo ser, que para eso estuvieron los GIGN (Grupo de Intervención de la Gendarmería Nacional) francesa muy acertados y muy valientes.

Venga tiros en el asalto al avión y unos malísimos actores terroristas que parecían crías histéricas antes de un concierto de Justin Bieber.

Con intención de hacerla algo más intimista nos acerca la vida del personaje central, uno de los polis y el conflicto personal al que se enfrenta cada vez que vuelve a casa después de una intervención, pero queda en casi nada.

Claroscuros constantes, escenas e blanco y negro, algo de azul y juego con los colores. A lo mejor el director nos quiere decir algo con esto pero no lo cojo.

El otro punto a destacar es el papel de la TV en la película que narra en directo los sucesos. Un poco de carnaza mientras tomas el café con croissant en una avenida parisina.

El detalle: El enorme parecido razonable entre el líder terrorista y nuestro queridísimo actor español el brujo. ¿O no?




sábado, 21 de diciembre de 2013

Fuerzas especiales: Acción a la Francesa

La única forma de cambiar el mundo es cambiar la historia

Fuerzas Especiales Montesinadas
Los franceses haciendo cine de acción del típico americano. Pero son franceses, eso quiere decir que son los mejores, ellos y su ombligo al que se miran constantemente.
Primera y única película de un director desconocido que nos cuenta historias de los malos de siempre encarnados en el demonio talibán.
Gracias a los americanos y ahora también, como nos explican en esta película, gracias a los franceses el mundo occidental está a salvo. Si se les ocurre raptar como es el caso de esta historia a una ciudadana francesas no dudan ni un minuto en plantarse en Afganistan o cualquier país que huela a terrorismo musulmán.

El entorno de esta época recuerda los ataques piratas en el pacífico o el atlántico y la reacción inmediata que tuvieron  los francos y sobre esa base, lanzan estas y otras películas de criminales de guerra, comandos especializados, periodistas aguerridos que quieren contar cosas, luchas cuerpo a cuerpo como si de un western se tratara con secuencias de duelos y bandidos entrando en los pueblos.

Y todo esto, para contar una larga y épica huida de territorio hostil cruzando nada más y nada menos que la cordillera del Himalaya. Por un momento me vi en ¡Viven!

10 días de huida donde van quedando cada vez menos del comando y la periodista que aguanta como la gran heroína.

Bien por ella interpretada por la guapísima alemana  Diane Kruger, la maravillosa Helena de Troya y bien también por Djimon Hounsou aunque me gustó mucho más en Gladiator.


El detalle: La mejor escena cuando Maina, la confidente, se levanta el burka para mirar cara a cara a la muerte, sobrecogedora. ¿O no?

sábado, 7 de diciembre de 2013

Proyecto NIM: ¡Give me banana!



El Chimpancé y el hedonismo

La verdad que sólo ver al chimpancé me proyecto en sus movimientos, en sus gestos, en su mirada y su búsqueda de la felicidad y el deseo de juego constante y búsqueda de placer... Nos vamos a los 70, con sus deshilachadas vertientes hippies, cuando los poetas y escritores tenían ese componente de reivindicación científica y revolucionaria, cuando todavía se hablaba de praxis o pragmatismo histórico, de teoría de la liberación y el “Hazlo a tu manera” de los Punk.
En ese contexto, una familia que encaja en ese arco adopta para el proyecto a Nim, un chimpancé al que tendrán la obligación de enseñarle el lenguaje de signos. Stephane, su nueva madre hasta lo amamanta, los hijos juegan con Nim hasta la extenuación y el padre mantiene una lucha de machos alfa que nunca se acaba.

Ninguno está preparado para controlar su energía y sin disciplina las cosas suceden sin más en un intento constante de descubrir la respuesta correcta a la pregunta de la época “lo adquirido o lo innato”.

Pero, un día, el experimento sufre un incidente violento, un episodio que cambiará la candidez del proyecto inicial por una travesía del sufrimiento y el desamparo.. Lo sacan de la familia, prueban a integrarlo con otros de su especie, que socialice, pero acaba siendo acosado por porras eléctricas y sus brazos un campo de batalla donde probar nuevas medicinas convirtiéndolo en un Yonki de las vacunas.

Abandonado por el doctor Herb de la Universidad de Columbia. Padre del proyecto que sólo busca reputación y fama pero se ve envuelto en el fracaso y acaba convertido en el inductor del comienzo a la crueldad con el animal. Parecía que sólo le importaban las cámaras y los reportajes pero no Nim.

Luego aparece Bob, un experto en lenguaje de signos y educación de chimpancés con el que establece una directa relación de colegas que fuman porros (esto es literal). El único que lo ayudará hasta el final involucrándose junto a un abogado en la lucha contra la crueldad animal y que alcanzó, en este caso, resoluciones humanas que atendían, casi por primera vez los derechos de los animales.

Bien por Nim y por lo mucho que nos enseña en esta película documental.

El detalle: El chimpancé quitando las lágrimas de la niña a besos. Ufffff qué pellizco ¿O no?

lunes, 2 de diciembre de 2013

Tres 60.

Mejor verla si vives con adolescentes, si no....
Tres 60

Volvemos a la carga con nuestros pinchos de cine que tenemos algo de tiempo.

Me quedé como a medias con Tres 60…Pero quizás era para verla en un cine de verano.

Por un lado los buenos: Un crecidito joven, Raúl Mérida metido a detective, un doctor  Watson, su hermano de 11 años con pinta de repelente; un coche clásico que cambiará el rumbo de la película cerca del final, una cartera que se encuentra accidentalmente y un carrete con fotos antiguas para empezar a tirar del hilo.
También está Ella, “el bellezón”, Sara Sálamo con la que se mantiene una constante tensión sexual desde el comienzo, no sólo el protagonista, y que “casi pero no”. A ratos, el buen hacer de Adam Jezierski ese reconocido y tan especial actor, el amigo que ayuda, que  da el toque de humor y te trae a la tierra.
La trama…otro amigo desaparecido hace años del que todos queremos saber. A ratos coqueteos con el simbolismo poco resuelto también, con falta de enganche de pesadilla que lleva al protagonista del fondo del mar a la luz de la superficie y que se repite como símbolo del que  escapa de los peligros, o lo intenta.

Por otra parte los malos,  un cuadro médico sin escrúpulos, un cura párroco encubridor y un extraño lobby de forenses, hígados y comisarios corruptos sin entrañas que trafican con órganos y  secuestra niños. Una trama con claves que llevan a otras claves buscando pruebas,  y de vez en cuando, casi sin sentido, sólo por mostrar el escenario, postales de surf.

Bien, a medias para su director Raúl Elcurzia, al que esperamos que en la próxima  no le falte histocompatibilidad.

De pronto, un accidente lo cambia todo y se necesita al verdugo, conflicto moral servido. Todo se ve de otra manera cuando el drama te toca a ti.

El detalle: Geraldine Chaplin reinventada para el concurso de "La Voz" ¿o no?